The Legal Examiner Affiliate Network The Legal Examiner The Legal Examiner The Legal Examiner search instagram avvo phone envelope checkmark mail-reply spinner error close The Legal Examiner The Legal Examiner The Legal Examiner
Skip to main content

Todos se comunican de maneras diferentes. Las personas que se caracterizan por no ser "escuchados" por las figuras de autoridad se sienten obligados a exagerar. El dolor que se experimenta en realidad es 4 de 10 en la escala de dolor, pero dicen a los médicos que su dolor es 6 sobre 10. Ellos no hacen esto por su propio beneficio. Lo hacen porque se sienten las figuras de autoridad han ignorado lo que tienen que decir.

Estas personas pertenecen a una variedad de grupos. Puede ser que ellos son muy jóvenes o muy viejos. Puede ser que son las minorías o que han sido marginados por su peso. En cualquier caso, se sienten como lo que dicen requiere un poco más para que la gente acuda a ellas.

Esta forma de expresión puede ser la ruina de un caso de lesiones personales. Esto es particularmente cierto durante los Exámenes Médicos Independientes. Los examinadores fijen su attención en identificar "la conducta de dolor" u otras formas de exageración.

Esto proporciona la base para el argumento del abogado defensor de que la demanda es imaginado – que la demanda total es un invento o producto de la imaginación del demandante.

El abogado del defensor argumentará que, si el demandante mostró signos de "conducta de dolor" exageración o adorno a un examen médico, entonces es posible que el demandante no resultó su herido como se dice. Se podría argumentar que el demandante no sufrió cualquier herida y está imaginando la reclamación en su conjunto.

Una vez que hay un rasguño o mella en la credibilidad del demandante, el asunto baja rápidamente. Todo el juez, árbitro o jurado se necesita un atisbo de duda respecto a si los demandantes están diciendo la verdad y el caso ha terminado.

Vivimos en una sociedad que se extiende a la verdad. En muchos contextos aceptamos los mentirosos. Un caso de lesiones personales se encuentra en el extremo opuesto de la especificación. No hay espacio para la mentira y, de hecho, no hay lugar para la exageración. Como escribí al principio, algunos grupos se sienten como si necesitan exagerar con el fin de ser oído. Esa exageración casi inevitable llega a ser la ruina de sus reclamaciones por daños personales. Es supremo que los demandantes – si coloran la verdad en absoluto – errar por el lado estoico y en lugar de exagerar sus lesions minimizar el daño que pasó.

Comments for this article are closed.